viernes, 6 de abril de 2007

Levante para dummies

Levantar, ligar, flirtear o seducir, son palabras que se escuchan regularmente en casi todo tipo de círculos sociales; sin embargo no siempre los comentarios que giran alrededor de estos términos dan cuenta de resultados positivos o exitosos en la conquista. Como todo en la vida el levantar tiene su ciencia y nunca esta de más leer algunos consejos que dependiendo de la persona y de la actitud de Don Juan que se tenga pueden llegar a funcionar.

El buen humor

La mayoría de personas coinciden en que despierta su interés alguien que logré hacerlo reír sin caer en la chabacanería y en el chiste fácil y tonto. Cuando la sutil línea entre ser divertido y payaso se cruza, las posibilidades de que el levante se haga efectivo disminuyen considerablemente, pues una cosa es que se rían con uno y otra que se rían de uno, cuando eso pasa es mejor retirarse con dignidad antes que exponerse a un inminente rechazo.

Para no caer en ese terrible error, el conquistador en primer lugar debe indagar en que es eso que divierte a esa persona en términos generales; y en un segundo, detectar que le divierte de él para explotarlo. Por ejemplo: si se sabe que le divierte verlo reír, el levantador deberá hacerlo con frecuencia pero con sutileza para no desgastar esa arma sin dejar de sacar provecho de ella. Se trata entonces de un ejercicio de mera escucha y la única persona que puede saber que es eso que le resulta divertido de sí mismo a su levante es usted mismo.

Diversificar los temas: hablar de cosas que diviertan al otro.

La conquista es un trabajo muy similar al quehacer periodístico, requiere de espíritu investigativo que le permita al conquistador indagar acerca de lo que le interesa al otro para calar entre sus gustos. Es vital convencerse de que lo más importante no es ser el más bonito sino saber explotar lo que se tiene y la palabra es un buen mecanismo para cumplir con ese objetivo.

Si la indagación arroja que esa persona gusta de cierto tipo de música, cine o lectura, la idea es poder hablar de ello; ojo no siempre los temas preferidos de la persona que se desea son siquiera compatibles con los de uno, por eso es necesario llenarse de paciencia y tolerancia para que la ligada no se de por perdida antes de tiempo. En el caso de que sus gustos no calen entre los suyos usted debe tomar la decisión de si desiste o por el contrario insiste y se da a la batalla.

Si la decisión es la segunda, no necesariamente debe mentir, simplemente debe evitar ser ofensivo finalmente son sus gustos y eso se respeta. Gran parte de todo radica en lograr hacer negociaciones, pero esas se hacen cuando ya se ha captado el interés del otro.

Concentrase en la comodidad del otro
Cuando se espera atraer al otro es necesario hacerlo sentir lo más cómodo posible cuando se encuentre a su lado. Esto es simplemente para que cuando este solo; extrañe lo que tiene cuando esta con usted.

Cuando una persona no se siente cómoda en su compañía huye prontamente y es precisamente lo que no se quiere. Esto va referido a que debe retirar el foco en usted mismo y ponerlo en la otra persona que debe sentirse complacida, debe sentir que se busca su comodidad y agrado. En la etapa de la conquista no debe imponer sus gustos, los puede nombrar y si no tienen acogida, pues que importa ceder en ello por tener el gusto de estar con esa persona que le gusta.

De lo general a lo particular

Hablar de cosas de interés general y básico nada elaborado ayuda mucho pues de lo que se trata es de encontrar la difícil sencillez, que no es más que ese punto de encuentro entre esa persona especial y usted. Para ello es importante que tenga en cuenta que un tema general, no elaborado ni denso es un buen comienzo pues le permite tener una charla más fluida que puede irse particularizando en la medida de que los dos quieran hacerlo.

En caso de que la persona a quien quiera levantarse sea un experto en algún tema que sea de su dominio, pues aprovéchese de eso pero sin exagerar, pues si le quita protagonismo usted será el único perdedor, como decían las abuelas todo en su medida.
Tenga en cuenta que tampoco es una buena idea impresionar dando la imagen de sabelotodo, pero que un buen apunte es determinante a la hora de concretar el levante. La idea es encontrar el equilibrio entre mostrarse inteligente, pero no ñoño y eso se logra midiéndose en lo que se dice. No se debe hablar más de la cuenta pues se corre el riesgo de convertirse en un fanfarrón.

La indiferencia

Tras una primera etapa de total complacencia es bueno tomar cierta distancia para no ser leído como un intenso. La indiferencia temporal le permite medir que tanta mella han hecho sus atenciones en el otro, pues de haberla hecho en menos de lo que se cree lo buscarán y usted podrá continuar siendo el mismo de siempre pero con una diferencia clave, que lo pone un paso más cerca de su objetivo, ya sabe que el otro si esta interesado en usted. En pocas palabras se trata de lo que las sabias abuelas llamaban el darse a desear.

El factor sorpresa

Ser original, es muy importante cuando de levantes se trata. En esos casos la originalidad debe enfocarse a que cada cita sea diferente y poco similar a lo que hace todo el mundo. Por eso no repita frases de cajón ni clichés eso lo hará ver ridículo, es mejor que sea sincero y que hable con sus propias palabras.

Aquí también debe tener en cuenta no caer en la obviedad, por ejemplo si se decide por una tradicional velada romántica enfóquese en ser especial a su manera, en mostrar sus talentos para la cocina pero no se mentalice a que todo terminará en sexo es mejor dejar que eso sea espontáneo; además si no ocurre nada y hay interés usted estará pagando la cuota inicial de una increíble noche de placer, pero todo a su tiempo.

Finalmente, tenga en cuenta que no existen formulas mágicas para levantar, de ser así los cuentos de hadas no estarían llenos de brujas insatisfechas y amargadas o princesas asesinadas o dormidas. Simplemente hay pequeños consejos que se pueden tener en cuenta para que su labor de conquistador no empiece desde cero. Pero recuerde el consejo más importante es ser usted mismo, es que a cada cosa que haga por levantarse al tipo a la tipa de sus sueños le ponga un poco de lo que usted es, un poco de eso que nadie más le podrá dar.

1 comentario:

Juan Reca Live dijo...

Lo mejor de todo, ser uno mismo, asi de simple... la vitalidad del ser humano puede desprenderse de palabras o de actos como los que describias... muchas veces incluso las personas que no pasaron por esos procesos sino que iniciaron de alguna manera relaciones precozes añoran aun el tener momentos como esos...

Att... el Mago, Quien Aprende a Hacer Magia